– Patrimonio Cultural en peligro por falta de vigilancia y orden
– “Jugar con el fuego y aplaudirlo a sabiendas de que podemos perder nuestro patrimonio en llamas es la mayor demostración de inmadurez colectiva”
Por: Marco Aguilar
Pátzcuaro, Michoacán a 28 de julio de 2025.- En nombre del espectáculo turístico y el negocio disfrazado de cultura, la noche de ayer el Cantoya Fest 2025 puso en riesgo real y directo al patrimonio histórico más valioso de Pátzcuaro. Lo ocurrido no puede quedar como un incidente menor: es una muestra de anarquía institucional, incapacidad operativa y total desprecio por las normas que rigen una zona protegida por Decreto Federal desde 1990.
Esta inmadurez, tanto de autoridades como de la sociedad, es verdaderamente inquietante y exige una reflexión profunda.
A pesar de los anuncios, las elevaciones de globos de papel no se realizaron en una zona periférica o controlada. Por el contrario:
Se lanzaron decenas de globos desde el entorno inmediato de la Basílica de Nuestra Señora de la Salud, así como frente al Museo de Artes y Oficios y al Centro Cultural Antiguo Colegio Jesuita, sin vigilancia ni orden alguno.
Varios globos, al elevarse, se atoraron entre las ramas de los árboles patrimoniales e inmediatamente se incendiaron, generando llamas en sus copas y poniendo en jaque la integridad del follaje histórico, en un espectáculo realmente siniestro e inadmisible.
Algunos globos incendiados cayeron sobre techumbres históricas protegidas por teja y estructuras de madera, en un escenario de absoluto descontrol.
No se observó ningún dispositivo visible de Protección Civil, ni personal técnico, ni supervisión del INAH.
Todo esto ocurrió en una zona reconocida como Zona de Monumentos Históricos desde 1990, y dentro de una ciudad que busca ser reconocida como Patrimonio Mundial por la UNESCO. ¿Qué mensaje estamos enviando al mundo?
El responsable directo es el Ayuntamiento de Pátzcuaro, y en particular su presidente municipal, quien ha promovido este evento sin la más mínima capacidad de organización ni respeto por la ciudad que dice gobernar.
Esto no es promoción cultural. Es una negligencia peligrosa disfrazada de fiesta. Por ello:
1. Exigimos la suspensión inmediata de toda elevación de globos dentro del perímetro del Centro Histórico de Pátzcuaro.
2. Hoy sábado y mañana domingo, mientras continúa el festival, debe cancelarse esta actividad en la zona patrimonial. No se trata de una petición: es una responsabilidad legal y moral.
Si no se actúa con seriedad, la próxima nota no será una celebración: será una tragedia. Un incendio, un colapso, una pérdida irreparable.
La UNESCO no puede reconocer como Patrimonio Mundial a una ciudad que no protege su propio patrimonio histórico.
Pátzcuaro merece respeto. Su historia, su arquitectura y su memoria no son escenografía para intereses comerciales.