Diagnóstico de la CNDH señala que solo Michoacán, Querétaro, Coahuila, Aguascalientes y Baja California Sur no han registrado casos al interior de sus centros penitenciarios
Morelia, Michoacán a 23 de julio de 2020.- Gracias a los esfuerzos institucionales emprendidos por la Secretaría de Gobierno, a través de la Coordinación del Sistema Penitenciario, Michoacán se encuentra entre los cinco estados de la Republica libres de COVID-19 al interior de sus centros penitenciarios.
Así lo informó el coordinador del Sistema Penitenciario de Michoacán, Javier Ayala Rodríguez, al recordar que desde el pasado 10 de junio, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emite un diagnóstico del estado que guardan los centros penitenciarios de todos los estados, en relación a la propagación del COVID-19 al interior de los mismos, donde Michoacán se cuenta dentro de las pocas entidades federativas que no presentan casos, junto con Querétaro, Coahuila, Aguascalientes y Baja California Sur.
Por ello, el coordinador hizo un reconocimiento tanto a las autoridades penitenciarias como a trabajadores, personas privadas de la libertad y familias de quienes se encuentran en los 11 centros estatales, la Unidad Especializada para Adolescentes y Adultos Jóvenes y en todas las oficinas de la dependencia, por su participación en las acciones preventivas, lo cual incluye la suspensión temporal de visitas.
“Desde hace cuatro meses el Sistema Penitenciario adoptó con rigor todas las medidas de prevención por instrucción del secretario de Gobierno, Carlos Herrera Tello, a fin de proteger a la población penitenciaria y evitar una crisis sanitaria al interior de los centros, lo cual hemos conseguido hasta el día de hoy, gracias a la ejemplar participación de toda la comunidad penitenciaria”, señaló.
Finalmente, Ayala Rodríguez recordó que el Sistema Penitenciario no solo participa acatando diligentemente los protocolos de prevención, sino que al interior de diversos centros se producen insumos sanitarios, tales como gel antibacterial, productos de limpieza, cubrebocas, caretas y uniformes quirúrgicos para abastecer tanto a los propios centros penitenciarios, como al sector salud.
Al momento las personas privadas de su libertad a través de videollamadas han mantenido comunicación permanente con sus familiares.